viernes, 17 de junio de 2011

LOS INVITARON A SOBREVOLAR LOS RELLENOS SANITARIOS DEL CEAMSE


política


La organización ambientalista Greenpeace convocó a los candidatos a Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, a través de una solicitada publicada en el diario Clarín, a sobrevolar los rellenos sanitarios de la CEAMSE en el conurbano para constatar los impactos ambientales del incumplimiento de la Ley 1854 de Basura Cero.

El objetivo de la convocatoria es que los candidatos expresen su compromiso con el cumplimiento de la Ley de Basura Cero, que establece un modelo de gestión de residuos basado en el reciclado y la recuperación de los materiales, en base a un cronograma de reducción progresiva de la disposición final de residuos sólidos urbanos (RSU): 30% para 2010, un 50% para 2012 y un 75% para el 2017, tomando como base los niveles enviados a la CEAMSE durante el año 2004.

“El incumplimiento de la Ley ha alejado a la Ciudad de las metas de reducción progresiva de RSU establecidas por la norma y cada día se envían cerca de 6 mil toneladas diarias de basura a los rellenos sanitarios de Provincia, afectando el ambiente y la salud de las poblaciones que habitan en sus cercanías”, expresó Lorena Pujó, coordinadora de la campaña de Basura Cero de Greenpeace.

La semana pasada, Greenpeace denunció que, según los datos publicados por la Coordinación Ecológica Área Metropolitana Sociedad del Estado (CEAMSE,) durante los cuatro primeros meses de 2011, la basura generada en la Ciudad y enviada a rellenos sanitarios creció un 13,23% con respecto a los mismos meses del año 2010. En el mes de enero, se informó que el año pasado la Ciudad enterró 2.110.122 toneladas de residuos, más del doble de lo que debía enviar a rellenos si cumpliera con la Ley de Basura Cero, que impulsa el reciclado.

“Convocamos a los candidatos a Jefe de Gobierno a comprometerse a implementar la Ley en caso de ser elegidos en las elecciones de julio, y que se propongan cumplir durante su mandato, con la segunda meta de reducción que la Ley establece, es decir, una disminución del 50% de la basura enviada a enterramiento, cumpliendo asimismo con la prohibición de la incineración”, señaló María Eugenia Testa, Directora Política de Greenpeace.

Los residuos sólidos urbanos que son depositados en los rellenos del conurbano contienen una variedad de sustancias químicas que incluye metales pesados, una enorme cantidad de compuestos orgánicos como detergentes, solventes y contenidos de plástico como cloruro de vinilo, polietileno y formaldehído, entre otros. Al descomponerse los residuos se liberan líquidos lixiviados (líquidos que se filtran de la basura y contaminan las napas subterráneas) y gases que son altamente tóxicos para las comunidades vecinas. Los líquidos arrastran partículas de residuos y disuelven metales que son vertidos en el suelo y llegan así a los cursos de agua.